Por qué deberías adoptar la autenticación en dos factores
Con el avance de la tecnología, los crímenes cibernéticos son cada vez más sofisticados. El robo de cuentas en redes sociales, correos electrónicos y cuentas bancarias es una realidad común que ocasiona grandes perjuicios a las víctimas. Cuando un hacker logra acceder a esta información, puede robar datos sensibles, cometer fraudes financieros e incluso comprometer la privacidad con la filtración de fotos y documentos, entre otros.
En última instancia, las nuevas estrategias de los ciberdelincuentes han hecho que el uso de contraseñas fuertes ya no sea suficiente. Una solución eficaz para reducir los riesgos es adoptar la autenticación en dos factores, también conocida como 2FA, que proporciona una capa adicional de protección en el entorno digital.
Qué es la autenticación en dos factores
La autenticación en dos factores es un método de seguridad que requiere dos formas de verificación antes de permitir el acceso a una cuenta o a aplicaciones de un smartphone o computadora. A diferencia del inicio de sesión tradicional, que solo solicita una contraseña, esta herramienta exige un segundo código para completar el acceso.
Por qué deberías adoptar la autenticación en dos factores
El objetivo de la 2FA es evitar que alguien acceda a cuentas personales solo con la contraseña. Incluso si un delincuente descubre o roba la clave, necesitará el segundo código para acceder a la información. Esta protección es fundamental hoy en día, ya que la mayoría de documentos y datos, tanto personales como corporativos, se encuentran en el entorno digital.
Tipos de autenticación en dos factores
Existen diferentes tipos de autenticación en dos factores con diversos niveles de seguridad y conveniencia. Estos métodos pueden proteger redes sociales, cuentas de correo electrónico, servicios en la nube y cuentas bancarias. Los principales son:
• Aplicaciones de autenticación:
Los aplicativos como Google Authenticator, Authy y Microsoft Authenticator generan códigos temporales de un solo uso, llamados TOTP, que expiran en pocos segundos. Después de ingresar la contraseña, el usuario debe abrir la aplicación para obtener el código y completar el inicio de sesión. Este método es considerado seguro porque los códigos cambian rápidamente y no dependen de una conexión a internet.
• Token USB:
El token USB es un dispositivo físico que debe conectarse a la computadora para completar la autenticación. Este método es altamente seguro porque requiere la presencia física del token, lo que hace casi imposible que alguien desde otro lugar acceda a la cuenta personal. La desventaja es que se necesita un ordenador con puerto USB.
• SMS y correo electrónico:
Uno de los métodos más comunes es la autenticación por SMS o correo electrónico, frecuentemente utilizada por sitios de compras que buscan confirmar la identidad del usuario. Tras introducir la contraseña, el servicio envía un código al móvil o al correo electrónico registrado, que debe ingresarse para completar el inicio de sesión.
Aunque esta modalidad tiene algunas vulnerabilidades, como el riesgo de interceptación de SMS o hackeo de la cuenta de correo, sigue siendo una opción accesible y fácil para verificaciones rápidas.
• Biometría:
La biometría es una de las formas más convenientes y seguras de autenticación. Utiliza características únicas del cuerpo, como huellas dactilares, reconocimiento facial o lectura de iris. Muchos dispositivos móviles ya cuentan con lectores de huellas digitales o cámaras para reconocimiento facial. Este tipo de autenticación se considera muy segura.